domingo, 26 de febrero de 2012

Ignorancia... el mejor escaparate para el oportunismo empresarial

"Nada hay en el mundo tan común como la ignorancia y los charlatanes"
                                                                                        Cleóbulo de Lindos 

Si por cada estupidez que dijésemos nos recompensaran con 1€ más de uno estaría rico "podrido"...

He estado intentando comprender como ciertos empresarios, con carita de "cocreta", pueden llegar a convertirse en auténticos imanes de billetes morados de la UE, y después de darle tanta vuelta a la cabeza llego a la conclusión de que lo único que saben es que el ser humano es como diría José Mota, "muuuu Tonto.." y la verdad es que dan en el clavo pero de manera exagerada. Por que realmente no es su producto lo que les hace ganar dinero sino la ignorancia y la falta de personalidad que tiene el ser humano.

Puedo entender que productos, marcas o modas como la famosa dieta Dunkan puedan anclarse en nuestra sociedad como si de un parásito se tratase, digo puedo entenderlo por que a sabiendas de que por muy poco beneficioso, hay resultados y realmente está demostrando que ayuda a personas a conseguir un claro objetivo, perder kilos a diestro y siniestro. Por supuesto que ni aplaudo ni comparto la utilización de este método de adelgazamiento, ya que siempre he pensado que una alimentación adecuada es la mejor herramienta contra la obesidad y estas dietas extremas son realmente perjudiciales para la persona. Pero como resultado, si que proporciona el resultado para el que está pagando el consumidor aún a sabiendas de donde se está metiendo, o eso quiero pensar, que la mayoría sabe de lo perjudicial de este método.

Este tipo de Empresarios es normal que se forren de pasta, ya que te está vendiendo un producto que ofrece resultados.

Veo que ya nadie se acuerda de la baba de caracol. Que producto tan maravilloso. El empresario que la puso en marcha una de dos, o quebró o desapareció por que en el hueco de anuncios donde aparecía ya solo se ve uno del ordenador hp.
Que manera más fraudulenta e indignante de vender algo que ni ofrecía resultados visibles ni aportaba beneficio alguno tal y como vendía en su eslogan.
Pero piensas, como un producto tan malo, puede llegar a venderse sin tan siquiera salir en anuncios de horario comercial, limitando su publicidad a un canal que sólo los más aburridos e ignorantes puedan llegar a permanecer viendo durante más de un minuto.
La única razón, la persona, el boca a boca o como lo queráis llamar. No hay nada como una buena campaña de publicidad hacia personas claves, capaces de creer  que con un poquito de crema de baba de caracol pueda llegar a reparar tus heridas y convertirte en un poquito más bonito de como te parió tu madre.

Puede que algun@s de l@s que leáis esta entrada digáis ¡ála que exagerado este!....a más pruebas me remito.

El maravilloso champú equino...(hay Dios mío)...con este si que se están forrando pero a base de bien.

Hace 4 meses me comentó una alumna, Ricardo: ¿en Internet puedo buscar información sobre el champú de caballo?, completando su pregunta con un simple comentario como, es que me ha dicho una amiga que es buenísimo. 
A mí naturalmente se me quedó carita de "compadre cómpreme un coco".
La misma carita se me quedó el otro día cuando me entero que si vas de visita a la sección de maquillaje de mercadona y preguntas por una sombra de ojos o cualquier otro artículo, la agradable y siempre atenta chica de dicha sección te contesta con un "no, de esa marca no" a lo que te añade "por cierto tenemos champú de caballo". Añadiendo además con "biotina", ahí cambia la cosa, ya parece que te está poniendo por delante un estudio científico de cinco años sobre la viabilidad del producto. Pobre de vosotros...

Acaso ya nos hemos vuelto locos?.  Al principio pensaba que eran cosas mías y que los productos valían lo que valían y que hay que diseñar una buena estrategia comercial pero cada vez te das más cuenta que los que realmente quienes nos encargamos de adinerar a estos empresarios somos inconscientemente nosotros mismos, dejándonos llevar por la influencia de otros que al igual que muchos no alcanzan a valorar nuestro grado de ignorancia. Lo que nos lleva a probar productos que ni tan siquiera aparecen en anuncios de tv. Y sin tan siquiera informarnos de alguna manera investigando no más allá de foros peseteros e igualmente tan "pachangueros" como otros donde te aconsejan sobre métodos milagro en belleza y salud.

Quizás alguno siga diciendo, pues no estoy de acuerdo con lo que se escribe aquí, pero no me dejaréis de reconocer que vaya pelotazo están pegando con el dichoso champú, que ni te evita la perdida de cabello, ni da más brillo, y que el único crecimiento que aporta no es más que el de las cuentas bancarias de estos empresarios oportunistas de la ignorancia humana...


"Es ignorancia no saber distinguir entre lo que necesita demostración y lo que no la necesita"
                                                                                                                          Aristóteles